Instalar un doble anillo de cera en un inodoro es una técnica especializada de fontanería utilizada para abordar desafíos específicos de instalación, que consiste en emplear dos anillos de cera apilados para crear un sellado mejorado entre la base del inodoro y el collarín del desagüe del suelo. Este método generalmente se utiliza cuando el collarín del suelo está considerablemente por debajo del nivel terminado del piso — normalmente más de 1/4 de pulgada—, un problema común en casas antiguas con reformas de suelo, subsuelos irregulares o al reemplazar un inodoro por otro con una altura de base diferente que genera una brecha mayor entre el aparato y el collarín. Al duplicar el material de cera, este enfoque proporciona suficiente compresión para cubrir la brecha aumentada, asegurando un sellado hermético al agua y a los gases que un solo anillo podría no lograr. Cada anillo de cera en la configuración doble contribuye al proceso de sellado: el anillo inferior se comprime contra el collarín y el superior forma un sello contra la base del inodoro. La combinación del grosor de ambos anillos — típicamente entre 1 y 1.5 pulgadas— permite una compresión adecuada incluso cuando el collarín está hundido, evitando huecos que puedan causar fugas. Al usar un doble anillo de cera, es fundamental elegir anillos de diseño compatible, evitando modelos con grandes salientes (horns) en ambos para prevenir interferencias. En su lugar, los fontaneros pueden utilizar un anillo con saliente para sellar la tubería del desagüe y un anillo plano para sellar la base, o dos anillos planos, dependiendo de las necesidades específicas de la instalación. Los anillos se apilan cuidadosamente sobre el collarín, alineándolos para centrarlos sobre la abertura del desagüe, antes de colocar el inodoro encima. La técnica correcta de instalación es esencial al usar un doble anillo de cera para evitar errores comunes. El inodoro debe bajarse directamente sobre los anillos apilados sin balancear ni girar, asegurando una compresión uniforme de ambos anillos. Una presión desigual puede provocar que un anillo se comprima más que el otro, creando espacios en el sellado. Los pernos del inodoro deben apretarse gradual y uniformemente para distribuir la presión, evitando que se agriete la base de porcelana mientras se asegura una compresión suficiente de la cera. También es importante verificar que la altura total de los anillos apilados no exceda la brecha entre la base del inodoro y el collarín, ya que una cantidad excesiva de cera podría salirse hacia la línea de drenaje o crear una base inestable para el inodoro. Los dobles anillos de cera son especialmente útiles en situaciones donde elevar el collarín al nivel del piso no es factible debido a restricciones estructurales o consideraciones económicas. Ofrecen una solución práctica tanto para propietarios que realizan trabajos por cuenta propia como para fontaneros profesionales, permitiendo un sellado seguro sin modificaciones importantes en la plomería. En entornos comerciales, donde las condiciones del piso pueden variar y los inodoros sometidos a uso intensivo requieren sellados confiables, los dobles anillos de cera ofrecen una protección adicional contra fugas y emisiones de gas de alcantarillado. Sin embargo, es importante tener en cuenta que los dobles anillos de cera deben usarse selectivamente, ya que apilar innecesariamente puede provocar problemas como asiento irregular del inodoro o salida de cera hacia el desagüe. Los fontaneros generalmente recomiendan este método solamente cuando el collarín está significativamente por debajo del nivel del piso, utilizando anillos simples estándar para la mayoría de las instalaciones. Cuando se aplica correctamente, los dobles anillos de cera proveen una solución robusta y económica para instalaciones difíciles de inodoros, asegurando fiabilidad a largo plazo y previniendo daños por agua tanto en baños residenciales como comerciales.